Tarde con el pololo

Lejanos son los días cuando venía mi pololo a la casa y estábamos los dos en el sillón  viendo una película o estudiando en el comedor a la vista de todos. Ahora es tan normal que venga, salude a los que estén en la casa, suba a mi pieza, instale su computador y se ponga a jugar. Al parecer mi internet es mejor, así que aprovecha de bajar juegos y obviamente jugarlos mucho. Mientras yo en la cama con el notebook también hago lo mío. Antes solía arreglarme mucho si es que iba a venir a la casa, ordenaba mi pieza, hasta mi mamá me pedía limpiar un poco la casa. Pero ahora es muy distinto, lo espero con mi cara al natural, sin maquillaje y la pieza la ordeno cuando ya esta aquí, para que me ayude un poco. Ya hay una confianza que me encanta y disfruto. Tampoco es que me deje estar, cuando salimos, me gusta arreglarme harto y obvio que me gusta estrenar mi ropa nueva saliendo con él. 

Lo último que disfrute mucho fue jugar uno de sus juegos online con él, justo estábamos en equipos distintos, el ya en nivel 10 y yo recién aprendiendo para que servia cada tecla, entre que me mataban a cada rato y que le preguntaba todo lo que tenía que hacer. Fue divertido. La mejor parte fue cuando lo maté y su ego se derrumbo jajaja 

Es entretenido poder hacer ya cosas más caseras con tu pololo, por el hecho de que ya estamos en otra etapa de la relación. Lo importante es siempre crear nuevos panoramas y buscar cosas distintas que hacer, para no caer en la rutina.